Ramón Barraza, un maestro apasionado
Ha dedicado 16 años a la enseñanza, dejando una huella en sus alumnos
14 de may. de 2024 Por: Staff / Juárez Número Uno
El reconocimiento de quienes fueron sus estudiantes y la dedicación, a partir del compromiso que asumen en el aula cada semestre, de los que actualmente son sus alumnos, son algunas de las mayores satisfacciones que el Doctor Ramón Iván Barraza Castillo ha logrado capitalizar como maestro.
Con 42 años de edad, el profesor ha dedicado 16 a la impartición de clases, ocho de ellos en la UACJ y otros más en el ITCJ.
“Se siente muy padre que lo recuerden a uno, que al verme en la calle los jóvenes, que fueron mis alumnos, se acuerden de mí, y que ese recuerdo sea con cierto cariño, por la huella que dejé como docente en cada uno ellos”, comentó Ingeniero en Sistemas Computacionales.
Pero la tarea no ha sido nada sencilla, ya que el compromiso de Ramón Iván es compartir con los estudiantes la experiencia adquirida y tratar de ser un detonante para que tomen un rol más activo en la creación del conocimiento y sembrar el adecuado interés para que ellos también busquen la manera de regresar a la comunidad algo de lo que aprendieron.
En algún momento su formación académica lo llevaron a tener un paso por la industria maquiladora, pero su interés por regresar lo que recibió cuando fue alumno lo puso en el camino de la enseñanza.
“Yo quería regresarle a la comunidad y a los futuros egresados, ese conocimiento que a mí también se me impartió; darles habilidades y valores a los estudiantes, preparándolos para enfrentar los retos que se les van a presentar”, afirmó el docente.
Originario de esta ciudad, en la colonia Monterrey, su enfoque fue la conclusión de la Maestría en Ciencias de la Computación en el Tec. de Hermosillo y el Doctorado en Ciencias de la Ingeniería en la UACJ.
“La enseñanza es un gran reto. En mi caso, que soy de un área más tecnológica, trato de incluir todos los avances que día a día la tecnología nos ofrece y en ocasiones parece que nos rebasa. Hay que buscar siempre la manera de evitar quedarnos en la enseñanza tradicional. Hay que poner en el salón de clases los conceptos y tecnologías que atraigan el interés de los alumnos, hacerlos participes de la creación del mismo conocimiento”, finalizó Barraza Castillo.