Miguel Ángel Esparza: el boxeador que no se rinde ante nada

Con la motivación a tope, prendida al corazón, el boxeador juarense Miguel Ángel Esparza Cruz no escatima en el esfuerzo.

No se rinde en la lucha del día a día, tanto en el gimnasio donde entrena, en el cerro donde corre, en el automóvil en el que trabaja de UBER, como en los desvelos que experimenta debido a su reciente paternidad. 

Con 23 años de edad, 14 de ellos dedicados a la práctica del boxeo, “Fantástico” debutó en el profesionalismo en 2017. Desde entonces contabiliza 14 triunfos, cero derrotas y nueve nocauts. 

“Desde que tenía nueve años, entraron mis dos hermanos al boxeo y yo junto con ellos. Mi papá nos llevó para que no anduviéramos en la calle”, comentó el pugilista que vive en la colonia Obrera. 

Para Miguel la jornada arranca desde muy temprano, cuando se pone al volante trabaja como chofer de plataforma. Luego asiste al gimnasio a su primera practica con su entrenador Felipe de la Torre.

Regresa a casa para estar un tiempo con su esposa y su pequeño hijo, hasta que se llega la hora de tomar de nueva cuenta el vehículo y posteriormente los guantes en el entrenamiento vespertino. 

“Es una gran responsabilidad, está pesadito, pero si se puede gracias a Dios”, aseguró el joven sobre su faceta como papá. 

Su inicio fue marcado por el amateurismo, llegando a disputar competencias nacionales y obteniendo medallas para Ciudad Juárez. 

Pero llegó el día que se sintió en condiciones y con las cualidades necesarias para dar el brinco al boxeo profesional; y así lo hizo el 4 de noviembre de 2017, ante Kevin Espinoza. 

Su más reciente pelea la tuvo el 20 de enero ante Daniel García, a quien derrotó por la vía del cloroformo y obtener el Título IBF Norteamérica en la división de los superpluma.

La lucha de Miguel se presenta en varios escenarios y en cualquiera de ellos está lejos de tirar la toalla. La campana de nueva cuenta resuena en su cabeza y sale de su equina a darlo todo por su familia, en cada pelea, en cada round.